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Cómo arreglar un sofá hundido

Con el paso de los años o debido a un mal uso, puede ocurrir que el sofá se muestre con apariencia hundida y no resulte cómodo. Pero, ¿se puede arreglar un sofá hundido? Si le tienes cariño a tu viejo sofá, hay tips que puedes poner en práctica para darle una segunda vida y disfrutarlo más años.

Guía | Cómo arreglar un sofá hundido: los mejores consejos

Antes de nada, es importante conocer las razones por las que un sofá se puede hundir. Principalmente, sucede por las siguientes:

  • El sofá no tiene un soporte suficiente. Si el sofá no tiene una estructura sólida o unas patas resistentes, es más propenso a hundirse. Si te ha pasado más veces, considera comprar un mejor sofá o bien uno que vaya contra el suelo, dado que así no tendrás que preocuparte tanto por esta parte.
  • No se han respetado las restricciones de peso. Por lo general, los sofás resisten mucho peso. Sin embargo, si se salta sobre el sofá o se sientan muchas personas siempre en la misma zona, es posible que esa zona se vea más hundida que otra zona en la que no se sienta nadie. Trata de utilizar todas las zonas del sofá por igual.
  • Debido a un mal uso. Es importante hacer un buen uso del sofá para que no se hunda. Por ejemplo, evita que los niños salten en él.
  • El sofá está ubicado en un lugar con mucha humedad. Te sorprenderá, pero lo cierto es que la humedad puede dañar la espuma del sofá y otros materiales de relleno, lo que puede hacer que con el paso del tiempo el sofá se hunda. Trata de ventilar la estancia y mantenerlo en una habitación de no más del 70% de humedad.
  • El sofá es de baja calidad. En el caso de un sofá que está fabricado con materiales de baja calidad será propenso a hundirse que uno de una excelente calidad. Al fin y al cabo, los más económicos siempre son menos resistentes, la calidad es inferior y la durabilidad también es mucho menor.

Teniendo en cuenta estos consejos sobre su correcto uso, ahora sí es el momento de ponerse manos a la obra y de ver cómo arreglar un sofá hundido. Aunque nos siempre puede merecer la pena, por lo general es un problema que está a la orden del día y que tiene arreglo.

  • Coloca una capa de espuma de alta densidad o reemplaza el relleno por uno nuevo. “¿Que poner en el sofá para que no se hunda?” Para evitar que el sofá se hunda, necesitas añadir más espuma. Para ello, puedes colocar más espuma de alta densidad o bien reemplazar todo el relleno existente por uno mejor. Puedes usar espuma de alta densidad o fibras de poliéster.
  • Añade más patas al sofá para que aguante bien el peso. Puede ocurrir que el sofá se hunda por el excesivo peso, más aún si no tiene un soporte adecuado. Para ello puedes tratar de añadir alguna pata más o cambiar las que ya trae por unas más resistentes.
  • Emplea cojines para disimular un poco. Si te molesta sobre todo desde el punto de vista visual, siempre puedes tratar de colocar más cojines en esa zona que se ve más hundida y así darle un efecto óptico de más altura. Es una solución low cost y a cambio se verá bastante mejor que antes.

¿Nada de lo anterior te convence o nada funciona? En ese caso, considera cambiar de sofá.

Ten en cuenta que las anteriores soluciones te pueden ser de ayuda a corto plazo para solucionar el problema y que el sofá se vea mejor, pero si es de baja calidad o se encuentra bastante roto, lo mejor es que inviertas en comprar uno nuevo que no te cause estos problemas. Piensa en que podrías arreglarlo y volver a hundirse a los 4 días. ¡Depende de su estado!

¿Cuándo merece la pena reparar un sofá hundido?

Como ves, aunque es posible reparar un sofá hundido, deberás poner sobre la balanza si te merece o no la pena dependiendo de su estado, calidad y antigüedad.

Si el sofá está en mal estado y tiene muchos años, puede que no te compense invertir en él ni un euro más. Claro que, la cosa cambia si es un sofá para una segunda residencia o piso en alquiler y buscas darle una segunda vida antes de comprar uno nuevo. En esos casos, puedes tratar de repararlo y evitar meterte en más gastos.

En el caso de que le tengas un gran valor sentimental al sofá o que te resulte excesivamente cómodo, siempre puedes seguir apostando por él hasta que diga basta.

Si decides comprar un sofá nuevo, no dudes en echar un vistazo a nuestra colección de sofás. También podemos asesorarte en función de tus necesidades.