Cómo hidratar un sofá de piel

Si tienes un sofá de piel en tu salón, probablemente este sea la pieza central del mismo. Por ello, queremos ayudarte para que aprendas cómo hidratar un sofá de piel con el objetivo de que dure mucho tiempo en perfectas condiciones.

A lo largo de este post que hemos elaborado desde Sidivani, te ofrecemos una serie de consejos y pasos para que sepas cómo hidratar un sofá de piel para conseguir que conserve todas sus propiedades intactas como el primer día.

Si quieres saber más consejos o información sobre cómo sacar el máximo provecho a tus muebles, te invitamos a leer otros artículos de nuestro blog, donde publicamos de forma periódica post interesantes que pueden resultarte de ayuda. ¡No te los puedes perder!

Además, si estás pensando en comprar sofás de diseño, no dudes en consultar nuestro catálogo en el que podrás encontrar una enorme variedad de muebles para tu hogar de la mejor calidad.

¿Preparado para conocer los mejores consejos sobre cómo hidratar un sofá de piel? ¡Sigue leyendo para descubrirlos todos!

La importancia del cuidado de los sofás de piel

A la hora de elegir un sofá, son muchos los aspectos y características que hay que tener en cuenta para hacer una buena selección. Dependiendo de tus gustos personales, espacio, decoración de la estancia, presupuesto… las opciones pueden ser casi infinitas.

Una de las primeras decisiones que tendrás que tomar será elegir entre un sofá de tela o de piel. Ambos tipos ofrecen sus propias ventajas.

Entre las grandes ventajas que tiene comprar un sofá de piel encontramos que puede tener una vida útil muy prolongada siempre y cuando le proporcionemos un mantenimiento adecuado.

Hay que tener en cuenta que la piel, a diferencia de los tejidos, es un material orgánico, es decir, es “materia viva” por lo que su limpieza y mantenimiento es distinto al que se debe realizar en sofás de tela.

Saca lápiz y papel y apunta los siguientes consejos que te proporcionamos desde Sidivani para que sepas cómo hidratar un sofá de piel y que su mantenimiento sea perfecto.

Limpieza de un sofá de piel

El primer paso antes de empezar con la hidratación es la limpieza del propio sofá de piel. Para ello, te recomendamos que uses un paño suave, ligeramente humedecido.

Frota la tapicería de piel con el paño trazando círculos concéntricos, de fuera hacia dentro. De esta forma, conseguirás una cobertura más uniforme y completa y, en el caso de que existan manchas, podrás evitar que se extiendan por todo el sofá.

Después de este proceso, seca el sofá y cualquier resto de humedad que pueda tener con un trapo limpio, preferiblemente de algodón o cualquier otro material suave que no dañe la tapicería. En ningún caso seques tu sofá de piel con una fuente de calor artificial porque podría dañarlo.

No esperes a que el sofá esté demasiado sucio y haz limpiezas periódicas cada poco tiempo para conservarlo mejor. Puedes quitar el polvo con un paño de microfibras los días que te lances a hacer una limpieza general de tu salón.

En el caso de que aparezca alguna mancha importante por, por ejemplo, un derrame de una bebida, te recomendamos que quites la mancha lo antes posible.

Gracias a las propiedades de los sofás de piel, su limpieza y mantenimiento es duradero y las manchas no penetran de la misma manera que lo harían en un sofá de tela, por lo que es más sencillo mantenerlo limpio y en perfectas condiciones.

Hidratación de un sofá de piel

Ahora que ya sabes cómo limpiar tu sofá, vamos a darte algunos consejos para que sepas cómo hidratar un sofá de piel.

Para este proceso es muy importante que utilices productos específicos para ello, siguiendo siempre las recomendaciones de uso indicadas por los fabricantes. En cualquier caso, te recomendamos que pruebes siempre los productos primero en una zona que no sea visible del sofá para que puedas asegurarte de que los efectos son los adecuados y no se estropea el tapizado.

Puedes usar una crema hidratante que ayude a nutrir en profundidad la piel y mejorar su aspecto y le aporte un brillo que, además, actúe como una película protectora invisible que pueda repeler la suciedad.

Asegúrate de distribuir bien la crema de forma uniforme por todo el sofá. Te recomendamos emplear algún paño suave de nuevo que te ayude a extender bien todo el producto sin problemas.

Ahora que ya sabes cómo hidratar un sofá de piel, puede que te estés preguntando: ¿cada cuánto tiempo debo hacerlo? Desde Sidivani te recomendamos que lo hagas, aproximadamente, cada 6 meses, aunque esto puede depender del uso que hagas de tu sofá.

Otras recomendaciones para el cuidado y mantenimiento de un sofá de piel

Ahora que ya conoces cómo limpiar y cómo hidratar un sofá de piel, queremos aprovechar la ocasión para proporcionarte otros consejos que pueden resultarte útiles para mantener en buen estado tu sofá durante mucho tiempo:

• Mantén tu sofá alejado de la acción directa del sol porque puede provocar cambios en el color y textura del tapizado.
• No utilices productos químicos ya que podrían dañar la piel de tu sofá de manera irreversible.
• Evita colocar tu sofá en rincones con demasiada humedad para que no aparezcan manchas de moho que puedan perjudicar al sofá y a tu salud.

Esperamos que todos estos consejos sobre cómo limpiar y cómo hidratar un sofá de piel te hayan resultado de utilidad.

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